lunes, 4 de febrero de 2008

La canasta de la compra.

El saber comprar es fundamental, no solo en la cocina, sino en la economía familiar, por eso, hay que tener cuidado, podemos hacer platillos suculentos, muy de moda, pero tendremos un buen déficit, que podrá en riesgo los demás días de la semana. A lo mejor un día comeremos caviar, pero quien sabe como nos ira en los otros. Exageraciones aparte, para ser un buen comprador hay que saber observar, hay una gran cantidad de productos de temporada, otros que tienen poca demanda por diferentes motivos, que suelen estar en buen precio. También existen otros pre-cocidos, que nos facilitarán los tiempos de cocción, que con el estres diario vienen bien.
Para hacer una buena compra hay que tomarse su tiempo, para frutas y verduras no hay como acercase a cualquier mercado, donde encontraremos frescura, lo mejor de la temporada y los mejores precios. Así como los productos cárnicos y avicolas, claro en mucho más cómodo ir a una supermercado, donde no solo encontraremos lo antes mencionado, allí desde una televisión hasta un tornillo. Esto grandes monstruos que devoran todo, y que en determinados países especulan con el pobre consumidor.
Si nos damos tiempo al hacer la compra, iremos aprendiendo ha administrar tanto el tiempo como el dinero, no hay peor compra que se hace, aquella sin ton ni son, echando todo lo que vemos en la tienda, como si padeciéramos de alguna convulsión exacerbada, una enajenación cuyo resultado será desastroso, porque a la hora de desempacar lo comprado observaremos, poco sustancia y mucha chatarra.
Pero para comprar hay que tener un buen menú, lo aconsejable es semanal, de lo cual hablaremos en el siguiente articulo.

No hay comentarios: